Extender, ampliar, desarrollar la investigación.
Ampliar los conocimientos que se tiene acerca de un tema dado. Los tipos de investigación que se pueden hacer son: lecturas, estudios, preguntas en clase, conferencias, etc.
Profundizar, precisar, afinar la investigación.
Se trata de un grado refinado de búsqueda. En este caso, ya no se trata de ampliar en extensión, sino de penetrar en profundizar. El resultado de este tipo de investigación se denota en la precisión de los conceptos.
Aplicar, utilizar, concretar la investigación.
En esta decisión queda inclinada la aplicación de los conocimientos adquiridos. Es necesario llevarla a la práctica, que tenga utilidad lo que se ha indagado. Los resultados de una investigación son útiles cuando le sirven a una comunidad en alguno de los aspectos de la vida.
Pero no sólo las ciencias experimentales tienen aplicación práctica.
Relacionar, explicar, sintetizar la investigación.
Se trata del momento de hacer las conexiones, del trabajo investigativo, que parecieran aisladas, armonizar el trabajo con las teorías establecidas en forma independiente.
En resumen, la investigación científica, en sus primeros pasos, trata de ampliar el mundo de los entes conocidos. En seguida trata de profundizar en el conocimiento de algunos de ellos. Posteriormente es necesaria la aplicación práctica de esos conocimientos; y, en una etapa final, se dedica a la interrelación del saber aprendido.